Seguimos con la relación de Revolucionarios Agraristas o zapatistas, que tuvieron un apodo o sobrenombre:

11. Doroteo Luna Franco    Tropa    (1881-1947)    de Anenecuilco, Ayala, Mor.    "Dorochi o "Chéfera".

12. Elpidio Morán                Tropa                           de Ajuchitlan, Tlaquiltenango, Mor.    "Pivi"

13. Emigdio León Marmolejo   General Brigadier    (1878-1939)   Santa Rosa 30, Tlaltizapan, Mor.      "Jovero"

14. Encarnación Sánchez     Tropa   (1897-1976)    de Anenecuilco, SAyala, Mor.             "Chon"

15. Feliciano Palacios Medina    Coronel    (¿-1919)    de Villa de Ayala, Ayala, Mor.       "Gancho"

 

    En algunos casos, se carece del dato del año de nacimiento o muerte de los casi 15 000 hombres que participaron en el Ejército Libertador del Sur. Su lema fue "Reforma, Libertad, Justicia y Ley". Alguien sin fundamento nos hace creer que el lema del General Suriano fue "Tierra y Libertad", este lema es del viejo continente.

 

    En esta ocasión, escribiré algunos datos de Feliciano Palacios Medina, alias el "Gancho", originario y vecino de Villa de Ayala, estado de Morelos, tuvo conocimientos rudimentarios de medicina hecha en casa. Fue un magnífico calígrafo. En el movimiento revolucionario, el General Suriano lo utilizó como el intelectual del espionaje, razón por la que el pueblo le apodó el "Gancho", por enganchador hacia el movimiento agrario.

   Sus primeros estudios los realizó en la Escuela Real de su pueblo natal, ahí apoyó a su preceptor Otilio Edmundo Montaño Sánchez, autor del Plan de Ayala, como monitor, o sea el que le ayuda al profesor.

    Dentro del movimiento agrario, se integra en la línea de fuego hasta el año de 1918, a partir de esa fecha se convierte en el Secretario más cercano al Jefe Zapata, esta responsabilidad, le obligó a estar presente el 10 de abril de 1919, en la hacienda de San Juan Chinameca, municipio de Ayala; en esa hacienda le tocó negociar las armas y el parque que dijo entregaría el coronel José María Guajardo, a cambio de la entrega, a mansalva y bajo la traición mayúscula del hombre imperfecto mató los ideales del campesino, asesinó la dignidad de los pueblos y revivió a su máxima expresión la sumisión de los campesinos de Morelos. Así murió el General de División Emiliano Zapata Salazar, el miliano de los hombres valientes de México.